604043-Isla de San Simón
60 años desde que fuera refugio de niñxs huérfanos de la marina.
40 días de cuarentena que debían guardar los barcos que venían de las américas en 1838 y durante casi 1 siglo.
43 viajeros del Monchita, muchos de la guardia del caudillo, que murieron ahogados camino a la isla en 1950.
Entre 1936 y 1943, pasaron por la isla hasta 6.000 reos retenidos en condiciones inhumanas. Sus primeros habitantes fueron los monjes benedictinos en el siglo X con su vida anacoreta “Ora et Labora”.
La Oración y el trabajo es lo que muchos artistas practican en sus confinamientos en forma de “residencia artística”; en esta ocasión, la oración es ese espacio en el que de una manera u otra comunicamos con los que ya no están aquí.
Siguiendo los procesos de creación parecidos a Unerwartet/Ezustekoa, dúo con Jose Maria Arístegui sobre el fusilamiento de su abuelo Julián y Araotz-Vida y muerte, como investigación coreográfica sobre su ADN y los movimientos migratorios de su familia; Mikel trabajará con su cuerpo como catalizador de la historia vivida a lo largo de los años más oscuros y esperanzadores de la Isla de San Simón.
Por que hablar del pasado y recordar lo sucedido marca una diferencia en la historia y en el presente de los que estamos.
Mikel Aristegui
Donostiarra de nacimiento, tras 30 años como bailarín profesional y coreografo en Europa, principalmente en Alemania; se instala en Galicia donde intenta resetear y re-enfocar su carrera artística fuera del sistema competitivo. Crea SIL Producciones-Artes en movimiento y se centra en labores sociales y pedagógicas sobre todo en lo rural y con colectivos de distintas capacidades. En 2022 recibe una ayuda a la creación coreográfica del Gobierno Vasco pudiendo, por primera vez en su carrera, centrarse en una labor de investigación cuyo fruto es “Araotz-Vida y muerte”